En una noche mágica que quedará grabada en la memoria gastronómica de Donostia-San Sebastián, Tenerife desplegó todo su esplendor culinario en el prestigioso Basque Culinary Center. El evento «Tenerife en 360º» no fue solo una cena; fue un viaje sensorial que transportó a los comensales a las cálidas costas y fértiles campos de la isla canaria.
Tenerife Deslumbra, desde el primer momento, los asistentes se vieron envueltos en una atmósfera única. Imaginen el aroma del océano Atlántico mezclándose con las fragancias de los plátanos maduros y el tradicional mojo picón. Así fue como los sesenta afortunados profesionales de la gastronomía y la comunicación fueron recibidos en esta velada irrepetible. Los chefs tinerfeños, verdaderos embajadores de su tierra, tejieron con sus manos expertas un tapiz de sabores que iba más allá de lo culinario: era una declaración de amor a su isla.
El menú, estructurado en diez actos como una obra de teatro gastronómica, fue una verdadera sinfonía de contrastes y armonías. Todo comenzó con los Panes artesanos de Mario Bakes con contrastes relevantes de la isla, creación del chef Mario Torres, una oda a la tradición panadera de Tenerife que hizo que más de uno cerrara los ojos para saborear mejor cada bocado. A continuación, el chef Jesús Camacho nos sumergió en el Atlántico con su plato Tropicales y mar, donde las frutas exóticas de Tenerife bailaban en el plato con los frutos del océano, mostrando la diversidad de los productos locales.
Sin embargo, el momento cumbre de la noche llegó con la Armonía de Túnidos Atlánticos, preparada por el chef Jesús Marrero. Cada bocado era como una zambullida en las cristalinas aguas que rodean la isla, con el atún como protagonista indiscutible. Su preparación, realizada con un respeto y una maestría impecable, arrancó suspiros de placer entre los comensales, sellando el carácter único de la experiencia.
Tenerife Deslumbra como Referente Gastronómico
Este evento no solo fue un festín para el paladar, sino también una clara declaración de intenciones. Lope Afonso, vicepresidente y consejero de Turismo del Cabildo de Tenerife, lo dejó claro: “Tenerife es un destino líder y de vanguardia a nivel gastronómico, donde prima nuestra identidad cultural, la sostenibilidad, la calidad de los productos, así como la excelencia del talento de nuestros profesionales”. Sin duda, la velada fue prueba de ello.
Esta colaboración entre Turismo de Tenerife y el área de Agricultura, Ganadería y Pesca del Cabildo de Tenerife refleja una visión holística que conecta la gastronomía con el turismo y el sector primario. Como destacó Valentín González, consejero de Sector Primario y Bienestar Animal, el evento fue «un escaparate fundamental para mostrar y poner en valor nuestros productos de kilómetro cero«.
Innovación y Tradición en un Entorno Privilegiado
El Basque Culinary Center, uno de los epicentros de la innovación gastronómica en Europa, no pudo ser un escenario más apropiado para esta demostración del talento isleño. Joxe Mari Aizega, director general del centro, resumió la esencia de la noche: “La gastronomía de Tenerife es un verdadero tesoro que merece ser explorado y compartido, no solo por su sabor, sino también por su profunda historia y cultura”.
Cada plato fue mucho más que comida. Representaba el trabajo de los agricultores que cultivan las papas negras, el esfuerzo de los pastores que cuidan sus cabras para producir los mejores quesos, y la destreza de los pescadores que salen cada madrugada para traer el pescado más fresco. En definitiva, una verdadera inmersión en la esencia gastronómica de Tenerife.
Tenerife en 360º: Un Éxito Rotundo
«Tenerife en 360º» fue mucho más que un evento culinario; fue una declaración de amor a una isla que tiene mucho que ofrecer al mundo. Los sabores auténticos y emocionantes de Tenerife demostraron que, en ocasiones, los mejores tesoros gastronómicos se encuentran en lugares inesperados, como una isla en medio del Atlántico.
Tenerife deslumbra de nuevo al final de la noche, cuando los platos estaban vacíos y las copas casi vacías, quedó una sensación palpable en el aire: la de haber sido parte de algo especial. Haber viajado a Tenerife sin moverse de San Sebastián. Este evento despertó un deseo genuino en los asistentes: visitar la isla, sumergirse en su cultura y seguir explorando su fascinante oferta gastronómica.
Tenerife no solo conquistó paladares esa noche; también conquistó corazones.
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