La Asamblea del Comité Europeo de Empresas del Vino (CEEV), tiene nuevo presidente quien coloca que, sostenibilidad y salud serán los mayores retos por asumir.
Mauricio González Gordon ya como presidente de CEEV quiere abordar los principales retos del sector, entre los que destaca la «sostenibilidad» y el «etiquetado sanitario».
González Gordon declara que, la responsabilidad ejecutiva del CEEV recae sobre la Comisión del organismo. Su rol es de «representación», «coordinación e impulso», aun así, tendrá un plan ha desarrollar en los próximos 4 o 5 años.
Sostenibilidad y todo lo que implica.
González Gordon dice, el CEEV concentra más del 90 % de las exportaciones europeas de vino.
Esta dimensión que requiere ser sostenible «en sus tres vertientes: medioambiental, social y económica».
La sostenibilidad es uno de los capítulos más importantes para el sector. Muchas empresas ya lo están haciendo y están tomando iniciativas para reducir su huella de carbono, sus emisiones y su utilización de agua y desde las distintas federaciones se están desarrollando certificaciones para reconocer esas iniciativas y comunicarlas al consumidor.
«A veces ocurre que el consumidor no percibe al sector del vino como un sector contaminante o con incidencia en ese sentido «, recalca el presidente.
Muchos de los productores europeos están bajo una indicación geográfica.
Esto les imposibilita cualquier tipo de traslado, ellos, tienen que cultivar en la misma zona y esto obliga a que sea sostenible.
Salud
Otro aspecto importante y que va al unísono con la sostenibilidad, es la salud.
González Gordon, tras la importante y muy reciente votación del Parlamento Europeo, sobre el informe que propone en el etiquetado del vino colocar mensajes con la misma orientación, de las del tabaco para alertar que el consumo del producto puede causar cáncer.
Este etiquetado fue rechazado y se cambió por mensajes sobre el consumo moderado además de los riesgos del consumo abusivo.
En su opinión son los más importantes y en los que el CEEV ya viene trabajando «desde hace tiempo».
Otro aspecto, pero que también tiene que ver con el etiquetado sanitario, es el de la digitalización. Las bodegas para el próximo año deberán tener una etiquetas electrónicas que puedan ser leídas en todos los idiomas de la Unión Europea.
Estas de la información comercial del producto, deberán llevar el mensaje sobre el consumo moderado.
«Es un cambio relevante para el sector y tenemos un plazo de un año y medio. Muchas empresas ya han empezado la transición», señala González-Gordon.
Tras dos años de una pandemia…Guerra
No se ha terminado una situación global de la pandemia cuando llega la guerra con Ucrania creando incertidumbre y, está ya está generando consecuencias económicas.
Entre ellas, unos 850 millones de euros que las bodegas facturaban tanto a Rusia como a Ucrania.
Todo esto sin contar el encarecimiento de las materias primas, vidrio, cartón y el alza del coste de la energía.
Antes esta situación, González Gordon propone trasladar a las autoridades europeas la importancia de darle más apoyo a los acuerdos comerciales con terceros países.
Mantener programa de apoyo a la promoción, ya que Europa importa una muy buena parte de su producción.
González Gordon termina diciendo que el vino tiene «el desafío permanente de actualizarnos y rejuvenecernos» para «atraer a nuevos consumidores para que conozcan uno de los productos más representativos de la cultura europea y de cada una de sus zonas.
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