La vendimia en la Denominación de Origen Calificada (DOCa) Rioja ha comenzado oficialmente este miércoles con la recogida de las primeras uvas blancas en Viñedos de Aldeanueva de Ebro.
Efeagro
Las expectativas son de una alta calidad, aunque más ajustada en cantidad que la anterior, que podría situarse en el entorno de los 400 millones de kilos de uva.
El estado sanitario del viñedo es óptimo en el conjunto de las 65.811 hectáreas productivas de la Denominación, a la que pertenecen las comunidades riojana, vasca y navarra; y las expectativas cualitativas son muy altas, aunque todavía quedan unas semanas para que se generalice la vendimia en Rioja, que son claves para la calidad final del fruto.
En este sentido se han pronunciado, en declaraciones a Efeagro, el Grupo Rioja, la dirección de Viñedos de Aldeanueva -la mayor cooperativa de Rioja, con 3.000 hectáreas- y las organizaciones agrarias ARAG-Asaja y UAGR-COAG.
En cantidad, se espera un rendimiento moderado, debido, principalmente, a la falta de lluvias durante la primavera y el verano, lo que ha reducido la presión de las enfermedades fúngicas (mildiu y oidio) y permitirá una maduración equilibrada de las uvas, han detallado.
Las primeras uvas en cortarse, a partir de las 6:00 de este miércoles, han sido de la variedad tempranillo blanco, situadas en parcelas más altas de Rioja Oriental de los viñedos de Aldeanueva (La Rioja), firma que marca tradicionalmente el comienzo de la vendimia en la DOCa.
Abel Torres, director general de Viñedos de Aldeanueva, ha detallado que el ciclo vegetativo de la uva en Aldeanueva de Ebro ha sido “muy sano”, ya que en algunos momentos ha sido necesario regar ante la falta de lluvia, lo que ha permitido controlar el mildiu y el oídio, de modo que la uva tiene “gran calidad”.
“El estado sanitario del viñedo es perfecto” en los viñedos de esta cooperativa, aunque queda la parte “más delicada de controlar” antes de la vendimia, ya que “si llueve en exceso, puede haber problemas y si hay demasiada sequía, provocará una merma en la cantidad de la cosecha”, ha precisado a pie de las tolvas, a las que se han dirigido los primeros remolques de uva.
A falta de ver cómo se desarrollará el mes de septiembre, la impresión de las fuentes consultadas es la de lograr una cosecha más corta que la del año anterior, debido a la presencia de menos racimos y menos peso.
Desde el punto de vista sanitario, “nos encontramos con una campaña, a priori, excelente”, por esa «falta de lluvias y de fenómenos meteorológicos adversos”, lo que, unido a la diferencia térmica entre día y noche de las últimas semanas, han dado lugar a “una uva sana y de gran calidad”, han indicado en ARAG-Asaja.
La UAGR conviene también en que, “salvo incidentes puntuales y localizados de pedrisco, las viñas muestran muy buen aspecto a lo largo de toda la región”.
Esta organización ha añadido que “los viticultores, con su profesionalidad, han solventado las enfermedades fúngicas con un mayor empleo de fitosanitarios en aquellas zonas afectadas por las tormentas, lo que incrementa los costes de producción”.
Incertidumbre precios de la uva
La mayoría de los viticultores riojanos se enfrentan a la vendimia sin conocer los precios que recibirán por sus uvas, ya que, a pesar de que es obligatorio, “los contratos brillan por su ausencia”, según la UAGR-COAG.
Esta organización pide a las autoridades competentes que vigilen la formalización de estos contratos y que en ellos se refleje que el precio que recibirán los viticultores sea superior a los costes de producción, como indica la Ley de la Cadena Alimentaria.
En ARAG-Asaja también indican que esta semana comenzarán a vendimiarse las variedades más tempranas de blanco en la zona Oriental y los viticultores “aún no conocen los precios, dado que las bodegas no han presentado el preceptivo contrato”.
Vendimia segura
Para el Grupo Rioja -la mayor asociación de bodegas de la Denominación-, “los precios dependerán, como siempre, de la oferta y de la demanda, pero todavía persiste el desequilibrio en la ratio, debido al descenso en ventas motivado por la pandemia”.
“En todo caso, Rioja volverá a registrar precios en origen muy por encima de la mayor parte de las denominaciones de origen españolas y sus bodegas cumplirán, como siempre, con la Ley de la Cadena Alimentaria”, ha asegurado en esta asociación bodeguera.
Por su parte, Abel Torres, también vocal del Consejo Regulador de la DOCa Rioja, ha recalcado que “no se conocen operaciones de uva”, aunque su impresión personal es que “serán ligeramente superiores a los del año pasado”.
Según datos de la Consejería de Agricultura de La Rioja, el precio medio percibido por el agricultor por la uva tinta de la cosecha de 2020 se situó en el intervalo de 0,62 y 0,67 euros el kilo y entre 0,50 y 0,56 para las blancas.
El dispositivo especial de Cáritas para atender a los trabajadores temporales agrarios de Alfaro (La Rioja) ya ha comenzado a funcionar, al igual que el albergue, con todas las medidas necesarias para prevenir la propagación de la covid-19, han confirmado a Efeagro en el Ayuntamiento.
A medida que avance la vendimia, el resto de localidades con albergues y dispositivos para temporeros abrirán sus instalaciones con todas las medidas de seguridad, como es el caso de Logroño, que abrirá del 14 de septiembre al 13 de octubre.
Los Gobiernos de La Rioja, País Vasco y Navarra y los Ayuntamientos afectados mantienen una estrecha colaboración para proteger la salud de los trabajadores y garantizar la actividad agraria, han señalado a Efeagro en el Ejecutivo riojano.
Este año, el Gobierno de La Rioja asumirá de nuevo la realización y coste de las pruebas PCR a los trabajadores temporales agrarios desplazados a su territorio e implementará el protocolo para las campañas agrarias con los criterios y recomendaciones respecto al alojamiento, transporte y operativa, en consonancia con las recomendaciones del Ministerio de Sanidad.
De la misma forma, realizará cualquier actualización del protocolo que sea necesaria conforme a la evolución epidemiológica y el contexto sanitario y habilitará, de nuevo, el cordón de albergues para los trabajadores temporales agrarios desplazados sin contrato de trabajo, en diálogo y colaboración constante con las administraciones locales.
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